Me enteré ayer de esta trágica noticia gracias a Juande y me quedé helado.
Por desgracia mi trabajo me tiene totalmente absorbido y hace demasiado tiempo que no veia a Raúl, pero he compartido con él unas cuantas rutas en 4×4, los dos solos, mano a mano, yo con mi Jeep y él con su inseparable Tucson, y muchas veces me decía a mí mismo que este otoño tendríamos que retomar esas escapadas… Por desgracia ya no podrá ser.
Recuerdo de él sus ganas de hacer cosas, su amor por el monte, por el 4×4, por la Alcarria, y su gran generosidad que me abrió las puertas de su casa. Precísamente en su casa es donde conocí a María, fue sólo un día pero causó en mí una gratísima impresión, y hoy lamento no haber pasado más tiempo con ellos.
Raúl, María, estéis dónde estéis, descansad en paz. Si hay algún tipo de justicia divina serán felices en algún sitio, seguirán en los caminos y Raúl tendrá ese Clase G preparado del que siempre me hablaba.
↧
Por: scorpio4x4
↧